miércoles, noviembre 25, 2009

Un granito de arena por nuestro planeta

Por: Ricardo Salazar Alvarez


Antes de la llegada destructiva del hombre, la naturaleza podía regenerarse de cualquier catástrofe, pero la incesante presión a la que la sometemos hace que esta tarea sea cada vez mas complicada.
Todos conocemos las catástrofes naturales que el ser humano ha provocado y sigue provocando.
!Pan para hoy y hambre para mañana!, parece ser la máxima que guía a numerosas compañías mundiales que explotan los recursos naturales sin reparar en que, no son infinitos. Lo más grave del asunto no es la sobreexplotación, sino las consecuencias inmediatas que tienen sobre nosotros y nuestra planeta.
En relación a esto, he llegado a la siguiente conclusión. Antes de que se agoten las reservas de recursos naturales del planeta será necesario dejar de consumirlos, pues sus efectos negativos sobre el calentamiento global pondrán millones de vidas en peligro. Esto es un hecho pero poco hacemos.
Los gobiernos, las industrias y particulares continúan con sus actividades sin pensar en el mañana, seguramente confiando en que las nuevas generaciones se adapten a lo que les quede y descubran remedios milagrosos para los males que actualmente se desencadenen.
Siempre que leemos o escuchamos a alguien hablar sobre estos temas sentimos una desagradable sensación y preferimos pensar que se trata de un fanático ecologista con una actitud excesivamente alarmista. Preferimos pensar que ese momento de que habla (ese loco) aun esta lejos, que todavía tenemos tiempo para enmendar lo que hemos hecho y así continuamos con nuestras vidas sin cambiar nada en absoluto.
Pero es indudable que cada día desaparecen especies y lo hacen para siempre, para no regresar jamás. Especies que nuestros hijos conocerán tan solo por los libros. Cada día se talan inmensas superficies de bosques que abastecían de oxigeno a nuestra atmósfera. Cada año, la temperatura aumenta, La lista de sucesos similares es muy larga, pero nadie hace nada.
Es difícil que una sola persona haga algo al respecto sin alterar por completo su vida, o al menos eso parece. Sin embargo, cada uno de nosotros tenemos cientos de oportunidades diarias de mejorar la situación actual y de colaborar con nuestro pequeño granito de arena en la conservación de nuestro planeta.
Desde nuestro propio hogar podemos colaborar en esa tarea de protección con pequeños detalles que, repetidos por toda la sociedad, se convertirán en una importante operación global a favor de la conservación del medio ambiente. Para ello solo debemos ahorrar un poco de agua y energía eléctrica, reciclar los desechos sólidos, reutilizar recipientes, un sinfín de actos individuales que pueden llegar hasta donde llegue nuestro compromiso.
Una tarea importante para llevar a cabo esta misión esencial, que como las de los héroes de las películas pueden salvar el mundo, es informarse debidamente sobre el tema. Así comprenderemos que determinados residuos son extremadamente peligrosos, y comprender que el uso de estos debe de ser restringido y/o poder llevarlos a sitios específicos para que sean tratados para su aprovechamiento o destrucción.
También hay que resaltar la creciente avalancha de aficionados a los diversos deportes que se practican en plena naturaleza, los cuales pueden constituir también un peligro para los ecosistemas.
Cada vez son mas las personas que se acercan al campo, en busca de aire puro y aventura. Las cuales se asombran y se maravillan ante la pureza de las aguas de cascadas o el magnifico espectáculo de las montañas. Esas mismas personas son capaces de arrojar sus envases de botellas de agua al suelo. Convirtiendo un parque natural en un basurero.
Es lamentable que cualquier persona, utilice los ríos, océanos y bosques como basurero para arrojar todo lo que no quiere tener en casa, pero todavía es más lamentable que aquellas personas que disfrutan con la vida y el deporte en la naturaleza lo hagan.

Afortunadamente, también hay muchas personas que comprenden el problema y colaboran activamente para poner una solución. Por eso les hago la invitación, para que pongamos nuestro granito de arena.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario